Estados Unidos, con el apoyo de la OTAN, ha estacionado en posiciones de combate al menos cuatro cruceros misilísticos que se encuentran a la espera de la orden de Barack Obama para comenzar el ataque en territorio sirio.
Los engranajes de la maquinaria de guerra imperialista ya se han echado a andar:“Hemos desplazado los medios necesarios para cumplir con la opción que el presidente desee tomar, estamos listos para actuar al instante”, dijo ayer el secretario de Defensa, Chuck Hagel en una entrevista a la BBC. “Eso ocurrirá en coordinación con nuestros aliados”, añadió. “Tiene que haber una respuesta y la habrá”, certificó el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, quien explicó que sería contraproducente para los intereses norteamericanos permitir que otros regímenes crean que 'pueden utilizar impunemente armas químicas'.
Junto a las tropas norteamericanas se encuentran movilizadas fuerzas de Francia y Reino Unido pero en una clara y flagrante violacion del derecho internacional y de la ONU estan preparadas para actuar de forma inminente violando la soberanía siria. Ninguna de las potencias de la OTAN está a la espera de informes de Naciones Unidas ni de ninguna otra baza diplomática que pudiera impedir la intervención militar. Los tres, así como Turquía, la Liga Árabe, Canadá y Australia, con cuyos jefes de gobierno habló Obama el lunes y martes, sostienen que Siria utilizó armas químicas en su ataque de la semana pasada contra posiciones rebeldes en las afueras de Damasco.
Ninguno de los tres gobiernos alude ya a esa misión y, en realidad, solo se está a la espera de que Obama decida el momento más conveniente para actuar. Estados Unidos vuelve a ocupar el lugar del gendarme mundial que pone y saca gobiernos según le convenga a su propia economía y la de sus socios imperialistas.
La OTAN fundamenta sus próximo ataque en la necesidad de destruir emplazamientos de producción de supuestas armas químicas que estaría utilizando el gobierno de Al-Assad para combatir a los rebeldes. Sin esperar confirmación alguna de los expertos de la ONU sobre la existencia de dichas armas la OTAN se apresta a un ataque con misiles crucero y aviación. Nadie sabe los alcances de este ataque y la situación que podría desatarse en la zona, ya de por sí inestable, de Medio Oriente.
Nuevamente asistimos a la prepotencia imperialista de la OTAN comandada por los EEUU que pone en funcionamiento la maquinaria militar más poderosa del mundo al servicio de sus interese económicos y de dominación mundial. Pisoteando a la misma ONU, creada por ellos para refrendar sus crímenes mundiales, y violando el principio de autodeterminación de los pueblos, la OTAN se prepara para un nueva aventura militar en la que la sangre y los muertos los pondrá el pueblo sirio.
Las fuerzas antiimperialistas y democráticas del mundo deben intervenir en contra de esta nueva aventura militar yanqui, en apoyo al pueblo sirio que sin dudas defenderá su soberanía; confiamos para ello en la capacidad que desplieguen sus fuerzas antiimperialistas, patrióticas y revolucionarias en el marco de la unidad de acción antiyanqui.Estados Unidos prepara un inmenente ataque sobre Siria
Estados Unidos, con el apoyo de la OTAN, ha estacionado en posiciones de combate al menos cuatro cruceros misilísticos que se encuentran a la espera de la orden de Barack Obama para comenzar el ataque en territorio sirio.
Los engranajes de la maquinaria de guerra imperialista ya se han echado a andar:“Hemos desplazado los medios necesarios para cumplir con la opción que el presidente desee tomar, estamos listos para actuar al instante”, dijo ayer el secretario de Defensa, Chuck Hagel en una entrevista a la BBC. “Eso ocurrirá en coordinación con nuestros aliados”, añadió. “Tiene que haber una respuesta y la habrá”, certificó el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, quien explicó que sería contraproducente para los intereses norteamericanos permitir que otros regímenes crean que 'pueden utilizar impunemente armas químicas'.
Junto a las tropas norteamericanas se encuentran movilizadas fuerzas de Francia y Reino Unido pero en una clara y flagrante violacion del derecho internacional y de la ONU estan preparadas para actuar de forma inminente violando la soberanía siria. Ninguna de las potencias de la OTAN está a la espera de informes de Naciones Unidas ni de ninguna otra baza diplomática que pudiera impedir la intervención militar. Los tres, así como Turquía, la Liga Árabe, Canadá y Australia, con cuyos jefes de gobierno habló Obama el lunes y martes, sostienen que Siria utilizó armas químicas en su ataque de la semana pasada contra posiciones rebeldes en las afueras de Damasco.
Ninguno de los tres gobiernos alude ya a esa misión y, en realidad, solo se está a la espera de que Obama decida el momento más conveniente para actuar. Estados Unidos vuelve a ocupar el lugar del gendarme mundial que pone y saca gobiernos según le convenga a su propia economía y la de sus socios imperialistas.
La OTAN fundamenta sus próximo ataque en la necesidad de destruir emplazamientos de producción de supuestas armas químicas que estaría utilizando el gobierno de Al-Assad para combatir a los rebeldes. Sin esperar confirmación alguna de los expertos de la ONU sobre la existencia de dichas armas la OTAN se apresta a un ataque con misiles crucero y aviación. Nadie sabe los alcances de este ataque y la situación que podría desatarse en la zona, ya de por sí inestable, de Medio Oriente.
Nuevamente asistimos a la prepotencia imperialista de la OTAN comandada por los EEUU que pone en funcionamiento la maquinaria militar más poderosa del mundo al servicio de sus interese económicos y de dominación mundial. Pisoteando a la misma ONU, creada por ellos para refrendar sus crímenes mundiales, y violando el principio de autodeterminación de los pueblos, la OTAN se prepara para un nueva aventura militar en la que la sangre y los muertos los pondrá el pueblo sirio.
Las fuerzas antiimperialistas y democráticas del mundo deben intervenir en contra de esta nueva aventura militar yanqui, en apoyo al pueblo sirio que sin dudas defenderá su soberanía; confiamos para ello en la capacidad que desplieguen sus fuerzas antiimperialistas, patrióticas y revolucionarias en el marco de la unidad de acción antiyanqui.
Los engranajes de la maquinaria de guerra imperialista ya se han echado a andar:“Hemos desplazado los medios necesarios para cumplir con la opción que el presidente desee tomar, estamos listos para actuar al instante”, dijo ayer el secretario de Defensa, Chuck Hagel en una entrevista a la BBC. “Eso ocurrirá en coordinación con nuestros aliados”, añadió. “Tiene que haber una respuesta y la habrá”, certificó el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, quien explicó que sería contraproducente para los intereses norteamericanos permitir que otros regímenes crean que 'pueden utilizar impunemente armas químicas'.
Junto a las tropas norteamericanas se encuentran movilizadas fuerzas de Francia y Reino Unido pero en una clara y flagrante violacion del derecho internacional y de la ONU estan preparadas para actuar de forma inminente violando la soberanía siria. Ninguna de las potencias de la OTAN está a la espera de informes de Naciones Unidas ni de ninguna otra baza diplomática que pudiera impedir la intervención militar. Los tres, así como Turquía, la Liga Árabe, Canadá y Australia, con cuyos jefes de gobierno habló Obama el lunes y martes, sostienen que Siria utilizó armas químicas en su ataque de la semana pasada contra posiciones rebeldes en las afueras de Damasco.
Ninguno de los tres gobiernos alude ya a esa misión y, en realidad, solo se está a la espera de que Obama decida el momento más conveniente para actuar. Estados Unidos vuelve a ocupar el lugar del gendarme mundial que pone y saca gobiernos según le convenga a su propia economía y la de sus socios imperialistas.
La OTAN fundamenta sus próximo ataque en la necesidad de destruir emplazamientos de producción de supuestas armas químicas que estaría utilizando el gobierno de Al-Assad para combatir a los rebeldes. Sin esperar confirmación alguna de los expertos de la ONU sobre la existencia de dichas armas la OTAN se apresta a un ataque con misiles crucero y aviación. Nadie sabe los alcances de este ataque y la situación que podría desatarse en la zona, ya de por sí inestable, de Medio Oriente.
Nuevamente asistimos a la prepotencia imperialista de la OTAN comandada por los EEUU que pone en funcionamiento la maquinaria militar más poderosa del mundo al servicio de sus interese económicos y de dominación mundial. Pisoteando a la misma ONU, creada por ellos para refrendar sus crímenes mundiales, y violando el principio de autodeterminación de los pueblos, la OTAN se prepara para un nueva aventura militar en la que la sangre y los muertos los pondrá el pueblo sirio.
Las fuerzas antiimperialistas y democráticas del mundo deben intervenir en contra de esta nueva aventura militar yanqui, en apoyo al pueblo sirio que sin dudas defenderá su soberanía; confiamos para ello en la capacidad que desplieguen sus fuerzas antiimperialistas, patrióticas y revolucionarias en el marco de la unidad de acción antiyanqui.Estados Unidos prepara un inmenente ataque sobre Siria
Estados Unidos, con el apoyo de la OTAN, ha estacionado en posiciones de combate al menos cuatro cruceros misilísticos que se encuentran a la espera de la orden de Barack Obama para comenzar el ataque en territorio sirio.
Los engranajes de la maquinaria de guerra imperialista ya se han echado a andar:“Hemos desplazado los medios necesarios para cumplir con la opción que el presidente desee tomar, estamos listos para actuar al instante”, dijo ayer el secretario de Defensa, Chuck Hagel en una entrevista a la BBC. “Eso ocurrirá en coordinación con nuestros aliados”, añadió. “Tiene que haber una respuesta y la habrá”, certificó el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, quien explicó que sería contraproducente para los intereses norteamericanos permitir que otros regímenes crean que 'pueden utilizar impunemente armas químicas'.
Junto a las tropas norteamericanas se encuentran movilizadas fuerzas de Francia y Reino Unido pero en una clara y flagrante violacion del derecho internacional y de la ONU estan preparadas para actuar de forma inminente violando la soberanía siria. Ninguna de las potencias de la OTAN está a la espera de informes de Naciones Unidas ni de ninguna otra baza diplomática que pudiera impedir la intervención militar. Los tres, así como Turquía, la Liga Árabe, Canadá y Australia, con cuyos jefes de gobierno habló Obama el lunes y martes, sostienen que Siria utilizó armas químicas en su ataque de la semana pasada contra posiciones rebeldes en las afueras de Damasco.
Ninguno de los tres gobiernos alude ya a esa misión y, en realidad, solo se está a la espera de que Obama decida el momento más conveniente para actuar. Estados Unidos vuelve a ocupar el lugar del gendarme mundial que pone y saca gobiernos según le convenga a su propia economía y la de sus socios imperialistas.
La OTAN fundamenta sus próximo ataque en la necesidad de destruir emplazamientos de producción de supuestas armas químicas que estaría utilizando el gobierno de Al-Assad para combatir a los rebeldes. Sin esperar confirmación alguna de los expertos de la ONU sobre la existencia de dichas armas la OTAN se apresta a un ataque con misiles crucero y aviación. Nadie sabe los alcances de este ataque y la situación que podría desatarse en la zona, ya de por sí inestable, de Medio Oriente.
Nuevamente asistimos a la prepotencia imperialista de la OTAN comandada por los EEUU que pone en funcionamiento la maquinaria militar más poderosa del mundo al servicio de sus interese económicos y de dominación mundial. Pisoteando a la misma ONU, creada por ellos para refrendar sus crímenes mundiales, y violando el principio de autodeterminación de los pueblos, la OTAN se prepara para un nueva aventura militar en la que la sangre y los muertos los pondrá el pueblo sirio.
Las fuerzas antiimperialistas y democráticas del mundo deben intervenir en contra de esta nueva aventura militar yanqui, en apoyo al pueblo sirio que sin dudas defenderá su soberanía; confiamos para ello en la capacidad que desplieguen sus fuerzas antiimperialistas, patrióticas y revolucionarias en el marco de la unidad de acción antiyanqui.
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