Miles de españoles marcharon y rodearon el Congreso en Madrid exigiendo la renuncia de Rajoy y el cese de las políticas de ajuste impuestas por el gobierno español y la Unión Europea
La protesta comenzó pacíficamente, mientras los manifestantes se reunían frente a las barreras que bloqueaban su camino hacia el Congreso, pero una carga policial provocó tensiones, que fueron en aumento cuando la policía arremetió contra los manifestantes, causándoles varias lesiones.
La noche terminó con decenas de detenciones y la dispersión del resto de los manifestantes. Sin embargo las escenas de violencia sólo han logrado encender la ira de quienes se oponen a Rajoy y a su gobierno.
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